Entre los que somos amantes de los animales, especialmente si sentimos debilidad por los perros o los gatos, es muy habitual que convivamos en nuestro hogar con más de una mascota para, por un lado, disfrutar por partida doble, de todo el amor que nos regalan día a día y, por otro lado, para que puedan compartir juego, amistad y además que nunca se sientan solos.
Sin embargo, en gran parte de las ocasiones, incorporar un nuevo miembro a la familia cuando ya contamos con un compañero fiel de fatigas, no siempre resulta tarea fácil. Por lo que, para evitar situaciones tensas, resulta fundamental seguir una serie de pautas infalibles que permitan a nuestras mascotas adaptarse al nuevo escenario lo más rápidamente posible ¿quieres saber cómo?
A continuación, el equipo veterinario del Hospital Nacho Menes te da todas las claves para salir airoso de todo tipo de situaciones. Te presentamos las 3 más habituales:
Cómo introducir un nuevo perro en nuestro hogar
Cuando ya contamos con un perro en nuestra casa, es normal que a la hora de sumar un nuevo miembro canino a la familia nos surjan dudas sobre cómo hacer correctamente las presentaciones entre ellos para que todo fluya en paz y armonía. Así que, para lograr que nuestros perros recuerden su primer encuentro como un evento feliz necesitamos poner en práctica los siguientes consejos:
- Que tengan edades similares entre ellos. Para que nuestros perros compartan actividades comunes es importante que no haya demasiada diferencia de edad entre ellos y que tengan una vitalidad e intereses afines. Por lo que el nuevo perro debería tener una edad aproximada al que ya convive en el hogar.
- Observar cómo se comporta el perro que ya tenemos. Aunque habitualmente sea una mascota sociable, es importante asegurarse antes y ver cómo reacciona frente al nuevo compañero canino.
- Tener en cuenta la personalidad de la nueva mascota. Se trata de un factor muy importante a la hora de elegir a su nuevo amigo.
- Establecer la primera toma de contacto fuera de casa. Lo mejor es hacer las presentaciones en un espacio abierto, donde no se sientan atrapados y haya muchos estímulos, como por ejemplo un parque.
- Guardar una distancia prudencial. De esta manera pueden conocerse sin forzar el contacto, acostumbrarse a sus olores, sonidos y establecer contacto visual sin tensión y con tiempo.
- Una vez en casa esperar a que estén relajados. Es importante que estén tranquilos cuando se desarrolle el primer encuentro entre ellos.
- Mantenernos siempre cerca. El objetivo, evitar posibles enfrentamientos.
- Que dispongan de espacio y juguetes propios. Si cada perro tiene su propio rincón en el hogar y suficientes juguetes para cada uno, se evitan muchas peleas.
Cómo introducir un nuevo gato
Cuando un nuevo gato entra en casa se necesita de un período de adaptación para que el resto de los felinos encuentren su lugar sin problema. Para conseguirlo, la clave está en hacerlo de forma progresiva. Te mostramos algunos pasos a seguir para lograr que las presentaciones se realicen con éxito.
- Ayudarse de un transportín. Mediante el transportín, se evita que ambos gatos se peleen a la hora de conocerse por primera vez. Para garantizar una adaptación al cambio segura es importante establecer el contacto y el acercamiento con el transportín durante los primeros cuatro o cinco días.
- Preparar una habitación para el nuevo gato. Este es sólo un primer paso para que, al llegar, se sienta seguro en el momento de conocer a todos los miembros de la familia y en especial al gato que ya convive con nosotros.
- Tomar al nuevo gato en brazos. Tras la fase del transportin, los siguientes cinco días es recomendable coger al nuevo miembro felino en brazos para que el gato de la casa se acerque, le huela, toque y se acostumbre a su presencia poco a poco.
- Pasados 10 días, los gatos ya están preparados para encontrarse sin la mediación del transportín o de nuestros brazos.
- Que tengan su propio recipiente para el agua, comida y la bandeja de arena.
Introducción perros con gatos
Aunque la leyenda y la literatura haya proclamado desde siempre lo contrario, lo cierto es que perros y gatos pueden llegar a ser grandes amigos, conviviendo de forma pacífica. Así que cuando llega un perro a una casa donde ya vive un gato, es preferible que, al principio, el perro solo tenga acceso a algunas de las habitaciones para que el felino investigue por su cuenta y se acerque a su amigo canino de forma paulatina y a su ritmo. Al ser el gato un animal con un carácter más solitario y territorial que los perros es esencial evitar situaciones incómodas por celos u otras razones mediante algunos trucos:
- Ubicarlos primero en diferentes partes de la casa. Para que se acostumbren a sus respectivos olores y que olfateen el rastro debemos pasarlos de una estancia a otra.
- Que se habitúen al contacto visual. Es importante que en primer lugar se vean a través de un cristal sin tocarse.
- Finalmente juntar ambas mascotas en una misma habitación. Siempre bajo supervisión nuestra.
Conclusión
Tener el placer de disfrutar de dos o más animales de compañía es una fuente inagotable de satisfacciones y alegrías diarias. Por eso, a la hora de dar la bienvenida a una nueva mascota es muy importante estar preparados para que, desde el primer día, se sienta como en casa. Tampoco olvides someterle a un reconocimiento veterinario completo para así garantizarle una vida saludable y feliz junto a sus nuevos amigos y familia.
